domingo, 26 de octubre de 2008

DESECHA TUS TEMORES!!!






“Mas Jehová llamo al hombre y le dijo ¿Dónde estas tu?, y el respondió, “oí tu voz en el huerto y tuve miedo”. GN. 3:10


Por lo regular el miedo es una emoción que siempre nos persigue a todos los seres humanos, pero que se les ha atribuido a las mujeres.
En nuestra sociedad está casi prohibido que algún varón manifieste o haga pública esta emoción en su vida, y cuando lo hace lo llegan a catalogar como poco hombre o de plano le cambian este adjetivo por el de cobarde u homosexual.
El temor a pesar de que fue una emoción que experimentó por primera vez en la historia de la humanidad un hombre, se le ha atribuido como una emoción espontánea y normal en la vida de las mujeres, ha sido una de las emociones más comunes para identificarlas como tal, dicen” las mujeres son miedosas.”
Y lo peor de todo es que por generaciones hemos aceptado que nos coloquen tal etiqueta y creamos que así debe de ser.
La Biblia dice que cuando Adán desobedeció tuvo miedo y se escondió, obviamente como Eva formaba parte de el, Eva tenia la misma genética de Adán, le transmitió esa emoción a ella, y dice la escritura que se escondieron.
Porque una de las cosas que provoca el miedo es parálisis física, emocional y espiritual. El terror te inhibe, paraliza, neutraliza, no te permite avanzar ni aceptar el amor de Dios en tu vida.
El temor llega al corazón de muchas maneras, una de ellas es porque tal vez desde pequeña te enseñaron a sentir temor, otras de las maneras en que tu puedes manifestar esta emoción registrada en tu genética es porque tal vez tuviste una mala experiencia de algo o con alguien, cuando te paso algo triste, algo malo que afecto tu integridad como persona y fue allí donde la emoción del temor brotó y adquiriste temor ante una situación, a una persona o a un objeto determinado.
Por ejemplo hay personas, mujeres, que de niñas tuvieron malas experiencias con sus padres, con sus familiares o con sus vecinos, muchas de nosotras padecimos abandono familiar, rechazo, pobreza, mal trato,… y cuando formamos nuestra propia familia venimos arrastrando todas esas heridas en nuestro corazón y muchas de nosotras nos volvemos extremistas cuando enfrentamos una situación como la que sufrimos en el pasado. Un ejemplo personal, es que de niña mi familia se desintegro totalmente, mis padres acabaron su relación como matrimonio por causas que no voy a mencionar, pero lo que si puedo compartir es que a partir de esa ruptura mis hermanos y yo sufrimos abandono y falta de atención… al ser un problema para ellos, nosotros por estar pequeños, decidieron dejarnos aquí y allá, de repente vivíamos con una tío, o con la abuela, o estábamos solos en casa y ahí fue donde Satanás aprovechó para denigrar la imagen de Dios, en una pequeña que se encontraba sola, comencé a sufrir de acoso sexual por parte de muchas personas en ese tiempo, tanto adultos como niños y jóvenes mas grandes que yo. Crecí y me acerqué a Dios, tuve mis tres hijas, pero…cuando yo las dejaba solas por un momento o en manos de otra persona, el temor me acechaba y me sobresaltaba pensando que tal vez mis hijas podrían sufrir lo mismo que yo, y las veía crecer y no tenia paz, cuando entraron al jardín de niños, fue una lucha con el miedo, al grado de pensar que era mejor tenerles un maestro particular que dejarlas solas en la escuela, con quien sabe que maestros y mucho menos quería pensar que clase de compañeros ellas iban a tener.
¡Y el temor estaba ahí!, no me dejaba disfrutar del crecimiento de mis hijas, quería paralizarles a ellas sus vidas y la mía también, ¡solo por el miedo!, la emoción estaba allí presente, originando que yo quisiera vivir aislada junto con mis hijas y mi familia.
Tal vez puede que no te haya pasado a ti, como a mi, una experiencia desagradable, puede ser que el temor registrado en tu genética se haya hecho manifiesto cuando algún amigo, conocido o pariente te haya contado alguna experiencia fea, y esto ocasione que no solo que quedes paralizada tu, si no que tu paralices a otros con expresiones como: “no hagas esto porque yo supe de una persona que le sucedió esto por actuar así, y yo por es no lo hago”, “no te cases el martes porque yo supe de alguien que lo hizo y le fue mal”, “y no comas tal cosa porque yo supe de alguien que comió esto y murió”, y en fin, una lista de situaciones que nos vemos limitadas por hacer porque alguien sembró el terror en nuestras vidas.
Hay gran infinidad de miedos, por ejemplo, hay mujeres que le tienen miedo a la oscuridad, a los ruidos, al fuego, a la muerte, al embarazo, miedo al cáncer, miedo a hablar en publico, miedo a que sus maridos las engañen, miedo a la intimidad, miedo a establecer relaciones sociales, miedo a evangelizar, a predicar, miedo al fracaso, miedo al éxito, a un cambio de loock, etc.
Pero hermana, algo que debes saber, que el miedo es una consecuencia de una mala relación con Dios, ciertamente es una emoción que sentimos como seres humanos, pues Adán nos heredó esta emoción, pero cuando tú no te das cuenta de que esa emoción también ya fue exhibida públicamente, se convierte en un engaño en tu vida.
Adán fue engañado por este sentimiento,…. cuando Dios le hablo, no era para condenarlo ni para destruirlo, Dios quería tener un acercamiento con ellos para remediar la situación, pero Adán y Eva se dejaron engañar una vez mas por esa emoción que les hacía pensar en el mal para sus vidas, dice la escritura que ellos se escondieron, el temor los aisló, los neutralizó.
Muchas mujeres que han creído tal mentira de Satanás, que han adoptado y creído la etiqueta de que son mujeres miedosas, han paralizado sus sueños y metas, porque el miedo como tal, es una artimaña, es una treta que el diablo pone para que no puedas descubrir y aceptar el amor de Dios en tu matrimonio, en tu trabajo o en tu ministerio, y Satanás va a venir a trabajar con esa emoción que has creído por años que te pertenece porque eres mujer y va a usar aquello que quedó sembrado en tu mente a través de malas experiencias, para que no puedas caminar con la cabeza levantada, para que cuando Dios quiera darte una encomienda mayor, tu en lugar de salir, de creer, te escondas y te quedes paralizada, y así poder devorarte y acabarte.
“1 Pe 5:8 la Biblia dice: que Satanás anda como león rugiente buscando a quien devorar”.
El te acecha continuamente para que a través de ciertas emociones tú fracases, caigas, y de paso el darse un gran banquete contigo, como lo hacen los leones con su presa, literalmente.
Pero yo quiero que tú sepas algo, mira comúnmente en el mundo animal, específicamente el de los leones, son los leones machos los que rugen para asustar a su presa y que ella corra hacia el lado opuesto hacia el, porque del otro lado están las leonas listas para devorar a la presa, son ellas las que atrapan y devoran a las victimas aprovechándose del temor del temor que la presa tuvo para enfrentar al león, aunque finalmente cuando todo el trabajo esta hecho, el también forma parte del festín, aunque el león lo único que hace es rugir para guiar a la presa a donde están las leonas, estas la rodean y la matan.
Por ello cuando te viene un temor, la inseguridad para realizar algo, ello viene a ser como el rugido del león, y el temor hace que tú te paralices o corras hacia el otro lado y las leonas te destruyan.
Y lo que debes de hacer cuando tengas temor a algo o a alguien tiene que ir hacia esa situación y enfrentarla. Porque Satanás solamente ruge, ya no puede paralizarte porque dice la escritura que el ya fue derrotado y fue exhibida públicamente su derrota.
¡¡¡¡Pero tú has creído que esa emoción te pertenece y lo que haces es huir hacia el lado equivocado o mantenerte escondida!!!!
Pero cada vez que venga el miedo tu te vas a enfrentar allí donde escuchas el rugido que te dice: No lo hagas, ten cuidado, no eres capaz, no puedes, todo te va a salir mal, no eres el indicado, acuérdate de los que te paso, acuérdate lo que sufriste antes”.
Tu te vas a parar y te vas a enfrentar y le vas a decir: Es mentira Satanás, yo soy nueva criatura, tengo una nueva naturaleza, he cancelado todo temor, toda maldición, toda atadura al pasado y ahora tengo autoridad y valentía porque Cristo me ha delegado potestad sobre toda emoción, y ahora tengo dominio para aplastarte en el nombre de Jehová.
Hay mujeres que siguen escapándose y corriendo hacia el lado equivocado, escondiéndose, inhibiéndose de hacer grandes cosas, hay quienes tienen grandes metas, proyectos, como esposas, como madres, como profesionistas, pero el temor, la baja estima, el rugido del león las ha frenado, han escuchado esas voces del infierno que les dicen: yo no puedo, yo no sirvo para esto, no puedo enfrentarlo, no puedo enfrentar en engaño, no puedo enfrentar el fracaso de mi hija, no puedo mas con mi hijo que se droga, no puedo con el ministerio, ¡tengo miedo! Y sola estas llegando a la boca de la presa, al fracaso, a la autodestrucción de tus sueños, a la causa de la gran mentira del temor.!!!!
Escucha esto hermana, Satanás lo único que hace es rugir, es ruido porque el ¡¡ ya esta vencido!!, pero usa esta emoción para acabar con tus proyectos de vida.
Mira estadísticamente, el 60 % de los temores no tienen base alguna, y por tal motivo no se va a cumplir, (ejemplo, dices yo tengo miedo a las alturas, y nunca andas en las alturas, o yo tengo miedo a los elevadores y en el lugar donde vives no hay elevadores).
El 20 % están enfocados en el pasado (como en mi caso), y como ya paso pues ya no puedes hacer nada.
El 10 % están basados en cosas insignificantes, (o sea no te cambian la vida).
Y del 10 % restante, solo el 5 % podrían ser justificables.
O se que como mujeres invertimos nuestro tiempo en miedos que no se van a cumplir, pero cuando te sientas a pensar en tus temores, ¡caíste en la trampa de las leonas!
Mujer, Dios no va a hacer nada para darnos miedo, ni mucho menos para que tu vida se quede paralizada. ¡Eso lo va a hacer Satanás!
Dios te va a decir:,¡ hey mujer, sal de ahí, sal de tu cueva, movilízate, a pesar de todo, el sigue teniendo planes contigo, en tu familia, en tu trabajo, en tu ministerio!, hay gente que piensa que el llamado, el ministerio o el liderazgo es una carga, es un dolor de cabeza, por eso siguen sentados en una banca, porque el temor no les permitió salir, muchas de ustedes estaban preparadas para tener una gran profesión, tenían capacidad para lograr tremendas cosas en la vida, tenían un llamado a misiones porque Dios sabe que eres capaz para eso y mas, pero te quedaste escondida, inmovilizada, porque te olvidaste de la verdadera naturaleza de Dios, que es el amor.
Porque el amor de Dios te da confianza, porque las que tienen temor no confían ni en si mismas, no confían en otros, mucho menos en Dios, pero el Amor de Dios te da seguridad, te da autoridad, te trae gozo, el perfecto amor te trae satisfacción, por ello de mejorar tu relación con Dios, porque el perfecto amor echa fuera el temor, Eva era una mujer segura cuando disfrutaba de la perfecta relación con Dios, pero cuando falló, cuando descuidó su compromiso con Dios, Satanás, le puso temor y se escondió.
Pero Dios no quiere que el temor te aísle, el quiere que escuches su voz, que salgas de esa condición y que venzas el temor con su perfecto amor, con su palabra, porque cuando tu relación con Dios es buena, la Palabra esta de tu lado, y con la Palabra tu vas a huir del león y el temor tiene que huir.
El amor de Dios te da gozo, hay nuevas fuerzas, porque hay quienes nada las satisface, se sienten vacías, huecas, ni su familia, ni su trabajo, ni sus hijos, ni la iglesia las hace sentir felices, porque el temor las inhibió, las reprimió y porque el perfecto amor ¡¡ ya no esta en sus manos.!!
Dios quiere que seas libre de tus ataduras emocionales, de prisiones mentales. Dios quiere que seas libre de tus temores, que los deseches de tu vida porque el te creó para hacerte libre.
Ese pensamiento de temor, de angustia, soledad, de fracaso te está matando, y Dios quiere darte vida, “Lo que no fue no será” dice una canción, ya no vivas del pasado, ya no atormentes tu vida, no alimentes más esas leonas. Corre hacia el león, enfréntalo, enfrenta el temor, con la ayuda de Dios, el te esta llamando, no te escondas mas, sal de esa prisión espiritual en que Satanás te ha querido tener.
Mira a Dios, mira a sus ojos y dile hoy quiero tu perfecto amor, porque tu perfecto amor echa fuera el temor, todo este tiempo he vivido en temor, temor a no tener, temor a perder, temor a no encontrar, temor a fracasar, temor a no ser feliz, temor a no amar, temor a no sanarme, he vivido tantos años con estas ataduras que me mantienen prisionera y me he quedado estática, inmóvil, me he escondido en mi misma, no he logrado nada, porque el temor, esa mentira, me tuvieron atrapada. Pero ahora renuncio a esta emoción que no es mía, rompo toda atadura, toda cadena, que tu perfecto amor pudra todo yugo. Ahora soy libre, ahora oigo tu voz de Sanidad y Liberación para mi alma.

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