sábado, 26 de enero de 2013

LA HISTORIA ENTRE DIOS Y LAS PERSONAS




Todo debiera ser diferente.

Pero las cosas son como son: Ya no vivimos en el Edén, ya no paseamos con Dios por las tardes de otoño, el sol tiñendo de rojo nuestras espaldas mientras las hojas de los árboles se mecen a Su paso, en silenciosa adoración. No podemos levantar los ojos y ver los suyos brillando con cariño y humor, ni podemos oír su profunda voz preguntándonos qué tal hemos pasado el

“Un día maravilloso”, diríamos.

Pero todo eso ya pasó. Se arruinó.

Y ése es el drama de nuestra vida.

Y ya no podemos oír a Dios, ni ver su rostro. Ya no podemos oír su ronca voz.

Y el mundo se ha vuelto feo, y nacemos con un hueco en el alma. ¿Quién llenará ese hueco? ¡Dios mío, me han quitado a Dios!

Y vivimos nuestra vida intentando sobrevivir al trauma lo mejor que podemos. Procurando ser felices, procurando tapar de alguna manera ese hueco sangrante. Nos han quitado a Dios.

Y al momento de nacer comenzamos a morir. El bebé llora desconsolado. Algo no anda bien. Esto que siente no es normal. Sigue llorando, bebé. No es para menos.

Y vivimos una vida para la que no estamos preparados. Para la que no fuimos creados. Sintiendo miedo. Sintiendo vergüenza. Sintiéndonos indignos, carentes de valor. Perdidos. No, no fuimos creados para vivir así.

Perdidos.
Inseguros.

Y de repente experimentamos dolor. Horror. Sufrimiento. Y vivimos la vida intentando suplir la alegría que nos falta. Porque no es natural, este dolor. No es normal, este miedo.
Esta vergüenza… No, no es así como debería ser.

Pero Dios también sufre. Esperad, que voy. Os quiero tanto. Os echo de menos, mis criaturas.

Y de repente, Emmanuel, Dios Con Nosotros.

Y Dios Con Nosotros empieza a deshacer todo lo malo. ¿Te duele? Ven a mí, mi vida. ¡Pero si estás sufriendo! ¡Mi padre nunca quiso que esto fuera así! Acércate a mí, que soy tu consuelo. Confía en mí. Shh, calla. No pasa nada, yo me encargo de todo. Eres estupendo. Eres maravillosa. Tranquila… no volverás a tener sed.

Y la enfermedad se va, y el miedo se disipa. Y la angustia desaparece, y la desolación se olvida… ¿y qué queda? Paseamos con Jesús y el mundo empieza a ser como debería ser.

Hermoso.

Y Dios Con Nosotros habla. Os prometo, juro por mí mismo, que os amo a más que nada en el mundo. Sólo quiero que seáis felices. A partir de ahora todo será diferente, porque me llevaréis en el corazón. No volveréis a estar solos ni perdidos.

Brindemos por este nuevo acuerdo. Vino y pan para celebrar.

Y cuando llega el momento sucede lo innombrable. Dios Con Nosotros se deja matar.

Porque nos echa tanto de menos.
Porque no fuimos creados para estar separados.

Pero la muerte no le retiene. ¡Ha vuelto, y el mundo estalla de alegría!

Y aunque debe irse, ha tendido un puente. Venid a mí, mis criaturas. Ahora sí hay una manera. ¡Ya podemos estar juntos! Recordad por lo que brindamos. Me llevaréis en el corazón.

Y viene Dios El Consolador, y ya no estamos solos.
No, ya no estamos solos.
¿Pero cómo es posible?, preguntas con sorpresa. Hay luz donde sólo había oscuridad. El miedo ha desaparecido. Tienes ganas de reír.

veces nos parece verle, quizás un poco borroso, tras una ventana golpeada por la lluvia.
Y a veces podemos oírle. Su voz suena a lo lejos, pero se va acercando. ¡Ya voy! ¡Ya queda poco!

Y llega la hora.

Y cerramos los ojos una última vez. Y el mundo vuelve a ser hermoso. Y el agujero sangrante en el alma desaparece. Y levantas los ojos y Dios, con entusiasmo, te da la bienvenida. Un abrazo gigante. Tenía ganas de ti.

Y paseas por la playa con Él de la mano. Había tanto que no comprendía. He sufrido mucho sin ti.
Y Dios te mira con esos ojos penetrantes que lo revelan todo.
Y tu corazón se desboca de alegría.

jueves, 17 de enero de 2013

LA VIDA NOS ENSEÑA A ENFRENTAR Y SUPERAR CADA DIA.




Sólo con los años se aprende que nada es lo que parece.

 Que siempre volvemos a cometer los mismos errores.
 Que volvemos a creer en falsas promesas.
 Que siempre habrá quien nos traicionará.
 Que lloraremos por malos amigos, críticas maliciosas, malas decisiones y malos amores.
Así es la vida,
con sus penas, alegrías y con todas sus injusticias.
Pero nada es completamente malo, pues aún con todo lo sufrido, son experiencias que habremos ganado.
Es gracias a todo lo malo que vivimos que logramos aprender a enfrentar los retos de la vida.
Dentro de cada persona está su luz interior, esa que nos llevará a tomar la vida en la dirección correcta.

miércoles, 9 de enero de 2013

TOMATE TU TIEMPO




Toma tiempo para el amor…
¡Ése es el secreto de la eterna juventud!
 Toma tiempo para reír
¡Ésa es la música del corazón
 Toma tiempo para llorar…
¡Ésa es la señal de un gran corazón!
 Toma tiempo para leer…
¡Es la fuente del conocimiento!
 Toma tiempo para escuchar…
¡Es el poder de la inteligencia!
 Toma tiempo para pensar…
¡Es la llave del éxito!
 Toma tiempo para jugar…
¡Es la frescura de la infancia!
 Toma tiempo para soñar…
¡Es el suspiro de la felicidad!
Toma tiempo para vivir…
¡Porque el tiempo pasa rápidamente
y nunca regresa!