miércoles, 20 de marzo de 2013

MI PASADO NO SERA MI FUTURO




El pasado no tiene porqué repetirse, no si aprendemos de lo sucedido y actuamos con la sabiduría que nos da la experiencia.

Puede que en el pasado nos rompiesen el corazón, nuestras relaciones no resultasen, no supiésemos mantener la llama del amor o nos dejásemos llevar por engaños…

Pero el pasado ahí debe quedar, sólo como lección de vida. Es ahora, en el presente, cuando tenemos la posibilidad de actuar sabiamente para un futuro mejor. Hagámoslo.

 Nuestras vidas dependen de como queramos vivirlas, de como queramos construir en el presente, pues el presente es lo que le da forma a nuestro futuro.

Todas nosotras en algún momento hemos sufrido de un desamor o la separación de nuestra pareja, pero eso no nos impide seguir adelante con nuestra vida. Debemos mirar hacia el futuro y no mirar hacia atrás, pues el pasado hay que dejarlo donde pertenece, por eso es pasado.

Muchas de nosotras insistimos en arrastrar al presente nuestro pasado y eso nos impide volver a ser felices. Debemos darnos la oportunidad de empezar nuevamente, construyendo sobre una base firme.

De cada una de nosotras depende como queramos vivir nuestra vida en el futuro, por eso es conveniente realizar un proyecto de vida antes de empezar una nueva relación… La vida siempre nos da oportunidades de aprender de los errores, de nosotras mismas depende sacar lecciones de cada relación que vivamos, incluso de las que han resultado ser malas.

Como todo ser humano, cometemos errores, por eso debemos tomarnos un tiempo para reflexionar en todo lo bueno y lo malo que cometimos durante la relación, pues la mayoría de las veces es más fácil echarle la culpa a nuestra pareja antes que aceptar nuestros propios errores.

Pero ¿qué es lo que pasa si no aprendemos de nuestros errores? Que volveríamos a cometerlos en una nueva relación y volveríamos a fracasar, pues aunque suene fea esa palabra, cuando no funciona una relación por cualquier motivo es un “fracaso” del que de nosotras mismas depende que se convierta en experiencia.

Por eso cuando una relación empieza a fallar, debemos de tomarnos un momento para reflexionar y así tratar de evitar una ruptura, pero una vez que ya terminó una relación no podemos quedarnos sentadas a lamentarnos lo que pudo ser y ya no es…

Solamente queda aprender para que podamos adquirir experiencia y así mirar hacia el futuro y caminar con paso firme sin rencor o resentimiento, pues eso no nos permitirá darnos la oportunidad de ser felices nuevamente.

viernes, 15 de marzo de 2013

DETRAS DE TU SILENCIO ¡ ¿QUE SE ESCONDE ?





Todas tenemos algo que nos lleva a estar tristes o alegres, siempre tenemos un “minuto de silencio” para nosotras mismas…

Yo siempre necesito estar a solas, estar callada, estar en silencio, y no se piensen que por ello estoy enojada o que me molesta algo, no nada de eso…
Sólo ocurre que a veces necesito eso: silencio.

Silencio para encontrarme a mí misma, para pensar qué debo hacer con mi vida, qué debo hacer con todos mis amigos y unos que otros en la vida real…

Quiero estar muchas veces así, a solas en mi silencio, y no crean que siempre lo entiende quien vive cerca de mí.
No, se piensan que estoy enojada, o que me molesta algo…

El silencio es muy importante para todos, y yo lo recomiendo.

Muchas veces pienso en mi amiga cuando hablo así, pues ella en las pocas veces que logramos hablar siempre me dice de lo necesario que es el silencio, el estar en un cuarto donde sólo tiene cabida Dios y ella misma. Y así es, yo trato de hablar con Dios, intento arreglar lo que veo malo en mi vida.
Dios es mi amigo, es mi confidente, y es Él quien está detrás de todos mis silencios.

Yo necesito mi silencio para disfrutar de lo bueno y de lo malo que me da la vida. Trato de analizar cómo van mis cosas, me pregunto en qué punto de mi vida estoy, qué deseo de mi vida personal y profesional, como mujer…

Y les aseguro que después de mis “permitidos silencios” (porque no siempre los logro tener) salgo más renovada, quizás más herida, pero más valiente, y con más ganas de ayudar a quien necesite de mí… (Yo también muchas veces necesito ayuda)

Me gusta mi silencio, porque es en esos momentos cuando puedo encontrarme conmigo misma, detrás de mi silencio aún veo a una mujer a la que le faltan muchas cosas por hacer en esta vida, y veo todos los pequeños secretos que arriba les comenté…
¿y a ti…?

¿Te gusta tu silencio?
¿sabes practicarlo?

miércoles, 6 de marzo de 2013

DEJA DE VIVIR EN EL MURO




Dios nos creó con un propósito, puso un mapa debajo de nuestro brazo y dijo: “Mi deseo es que cumplas este plan, tengo sueños grandes para ti y este es el camino”.
Pero con nuestra inseguridad tapamos la voz del Espíritu Santo y escuchamos otras voces y cuando dejamos de escuchar la voz de Dios, nos perdemos en el mapa, y comenzamos a buscar que la gente nos diga, nos señale, y nos guíe en el camino pero, lamentablemente, ellos están más perdidos que nosotros. Mucha gente nos manipulará al aconsejarnos y nos dirá: “esto te conviene”, cuando en realidad a quienes les conviene es a ellos; y de esa manera te quitarán lo que  te pertenece y arruinarán tu vida.
Hubo una mujer que estaba “perdida en el mapa” porque andaba sin rumbo, estaba desperdiciando su vida, porque ella se entregaba a cualquier hombre, pero un día le sucedió algo diferente, llegaron dos hombres a su casa que no la estaban buscando a ella, sino que habían sido enviados por un general llamado Josué, para que investigaran la ciudad de Jericó en donde justamente vivía esta mujer.
 Va a haber un momento en tu vida en que las cosas van a cambiar radicalmente, porque  Dios mismo, dará la orden a alguien para que vaya a tu casa  a bendecirte.
 El rey de esa ciudad se enteró de que estos hombres estaban en la casa de Rahab y le mandó a decir a ella que los entregase. Pero ella era una mujer de fe, ¡sí así como escuchaste! y decidió no entregarlos. Fíjate lo que le dijo a los espías:
“Sé que el Señor les ha dado esta tierra; porque el temor de ustedes ha caído sobre nosotros, y todos los moradores del país ya han desmayado por causa de ustedes. Porque hemos oído que el Señor hizo secar las aguas del Mar Rojo delante de ustedes cuando salían de Egipto”.
Primera declaración de fe:
Ella dijo: “Sé que el Señor les ha dado esta tierra”, no tenía duda de que el Dios de ellos era el verdadero Dios porque él había secado el Mar Rojo. Era una mujer que le temía a Dios, sólo por haber escuchado acerca de él. Hay personas que cuando abrazan la fe, lo hacen de tal manera que creen con todo su corazón, aunque “vivan al límite” como Rahab.
ELLA ERA MAL VISTA POR LA GENTE, PERO FUE BIEN VISTA POR DIOS.
Segunda declaración de fe:
“Oyendo esto, ha desmayado nuestro corazón; ni ha quedado más aliento en hombre alguno por causa de ustedes”.
 PORQUE EL SEÑOR SU DIOS ES DIOS ARRIBA EN LOS CIELOS Y ABAJO EN LA TIERRA.
Ella no necesitaba que le explicaran doctrinalmente quién era Dios, porque ella había creído en él.
La fe no se explica, porque no tiene lógica racional,  la fe no es para opinar, la fe es para vivir. Se puede opinar de política, de fútbol, de trabajo, pero de fe no se opina; de fe se vive, de fe se conquista y se cree.
Tercera declaración de fe:
“Les ruego pues, ahora, que me juren por el Señor, que como he hecho misericordia con ustedes, así la harán ustedes con la casa de mi padre, de lo cual me darán una señal segura; y que salvarán la vida a mi padre y a mi madre, a mis hermanos y hermanas, y que librarán nuestras vidas de la muerte”.
Ella hizo un trato con ellos, y  puso como testigo a Dios, todo el que juraba por Él sin duda tenía que cumplir. Por su fe se salvó toda su familia, porque ella veía al Dios de Israel más grande que su reputación, que sus problemas, y que  la imagen distorsionada que otros tenían de ella.
Rahab un día dejó de vivir en el muro, porque no estaba ni afuera, ni adentro, necesitaba encontrar un lugar seguro. Pero un día se fue a vivir a su casa, porque cuenta la historia que se casó, y de su descendencia nació el Señor Jesucristo.
¡Recuerda que tu descendencia heredará las naciones de la tierra!
 Si te identificas con esta historia, no olvides que Dios no te ve como los demás te ven. Sólo tienes que ir a él y pedirle que perdone tus pecados (cualquiera que sea) y te limpie con la sangre de su hijo Jesucristo.
Dice el libro de hebreos: “por  la fe la prostituta Rahab no murió junto con los desobedientes,pues había recibido en paz a los espías”.
En este pasaje se dice lo que ella hacía, no para recordarnos nuestros pecados, sino para mostrarnos que para el Señor no existe ningún pecado que no merezca su perdón, y lo más glorioso es que dice que fue obediente, porque le creyó a Dios no a los hombres.