martes, 27 de noviembre de 2012

HICE UN JURAMENTO A MI MISMA




No porque me lo pidan, sugieran o impongan… no por los demás sino por mí misma. Por mí, por mi valor como mujer, por lo mucho que merezco y valgo me hago este juramento:

Lucharé por mí misma, por hacerme respetar y valorar, por disfrutar de mi vida, con sus risas y lágrimas. Será por mí que decido tomar esta firme decisión. Yo soy mujer, yo cuidaré de mí misma.

Hoy he decidido jurarme a mi misma a luchar por mí misma, a reír por mí misma, a llorar por mí misma y a superarme por mí misma; sólo por mí misma y por nadie más.

Ya no lo haré por nadie más, ya no me preocuparé por nadie. Reiré, lloraré, lucharé, me superaré, bajaré de peso y todo… pero será por y para mí misma.

Ya no permitiré que me afecte nada de lo que hagan todas las personas, no permitiré que una palabra, una acción o un hecho me afecte.

Esto no quiere decir que me convertiré en una mujer dura y sin sentimientos, sólo que no voy a permitir que nadie devalúe mi integridad, mi dignidad, mi fortaleza o mi seguridad como persona y sobretodo como mujer.

Atrás quedará ese tiempo en el que era yo quien buscaba a mis amigos, y quien buscaba ser amada… ¡Ya no más! Los amigos que quieran estar y compartir un momento de su vida conmigo serán bienvenidos y para los “amigos” para los cuales yo era sólo una opción, ya no habrá cabida.

Atrás quedó buscar amor en el lugar y con la persona equivocada, ahora sólo la persona que realmente valga la pena merecerá mi amor, mis pensamientos, mi cuerpo y mi ternura.

Ya nunca más permitiré una palabra discriminatoria, por pequeña que sea; nunca más me permitiré ser la ultima en la lista de nadie.

Gracias a Dios nunca he recibido un golpe por parte de un hombre, pero hoy tengo más claro que nunca lo permitiré; por muy enamorada que esté, jamás lo permitiré, porque quien te ama no te hace daño.

ME HAGO EL JURAMENTO DE CUIDARME, SÓLO POR MÍ.

viernes, 16 de noviembre de 2012

APRECIAR EL TIEMPO Y LAS COSAS QUE NOS DA LA VIDA .




Apreciar el tiempo y las cosas que nos da la vida
“Cuando el Amor habita en tu corazón tus acciones reflejan su belleza”

Siempre estamos tan angustiadas en nuestras vidas que no sabemos apreciar lo que tenemos frente a nosotras. Por ejemplo, un día con sol, una llamada que esperábamos, ver nuestro hogar tomar forma, ver a los hijos crecer, dar un beso a nuestra madre que aún tenemos con nosotros…

Estamos tan sumergidas en nuestras penas, nos empeñamos tanto en tener cosas materiales que nos olvidamos por completo de lo que al día de hoy se nos regala de gratis.

Pensemos un poco:

¿Por qué no gozamos del minuto de oro que todos tenemos?
¿Por qué no sabemos apreciar el buen amor que se nos da sin pedir nada a cambio?
¿Por qué siempre nos estamos quejando de cosas que no poseemos?
Hay una pequeña conclusión que tengo yo al respecto: no disfrutamos de nada porque nuestras vidas están vacías, no tenemos la copa llena, estamos totalmente vacías por dentro, y no hay nada que pueda satisfacer. Es nuestro deber propio que la perspectiva de esas carencias sean cambiadas, sólo nosotras mismas podemos hacer que nuestra vida sea más alegre. Nadie que no seas tú misma puede estar dentro de tu ser para decirte cuanto mal estás haciendo, sólo tú conoces tu propio corazón, sólo tu sabes el porqué de esa desdicha que ronda tu vida.

No estás contenta como van tus cosas, sientes que la gente es injusta contigo, no es justo para nadie, empezando por ti. Debes quedarte con tus pensamientos, apartarte un poco del mundo y entrar en silencio para saber que está ocurriendo en ti, y cuando sepas qué es lo que te pasa tienes que dar un paso adelante y tratar de recomenzar en caminar de nuevo, tratar de lo que te esta poniendo mal salga de tu vida.

Si piensas que tu vida se te escapa, habla, exprésate, renuévate y sigue adelante, es muy corta nuestra estancia por esta vida y nos aferramos a vivir amargados y tristes por no enfrentar nuestro problema…
No permitas que nadie te quite esa felicidad que se te regala, disfruta del día a día como si fuese los últimos días, sal de casa, mírate, camina segura por la vida, tú eres una persona que vale mucho, y debes creértelo para que se te refleje en el rostro.

Cada día es una nueva oportunidad para cambiar lo malo que hacemos o hemos hecho.

Cada día es un regalo que Dios no da para recomenzar.

Si te lo propones, cada día será un bello amanecer, lleno de esperanzas e ilusiones.

Lo material nunca llenará tu ser, aunque tengas armarios llenos, el corazón puede estar vacío, porque lo primero que hacemos cuando nos sentimos mal es ir de tiendas y gastar en cosas que jamás nos pondremos.  Si puedes, ve y devuelve esos caprichos que compraste, la solución no está en tener más, la solución está que tú te llenes de buenas energías, mires la vida con otros ojos y sepas apreciar lo que se te regala sin que tengas que gastar nada de ti, sólo saber mirar con amabilidad y amor todo lo que te rodea.

viernes, 9 de noviembre de 2012

SANAR LAS HERIDAS CON FE




Muchos de aquellos que se forman en el seno de una religión o de una fe en la que pueden creer sin reservas, son afortunados.

Sin embargo, cada quien ha de encontrar su propio camino y su propio credo, y el encontrarlo cobra mayor importancia para cada uno de nosotros a medida que envejecemos…

El tener conciencia de un orden, de una presencia que está más allá y alrededor de nosotros y que se manifiesta en todas las cosas vivientes, constituye en si mismo una fe.La maravilla del más pequeño copo de nieve y la grandeza de la Vía Láctea; el retorno de cada primavera; cada pajarillo en su propio y peculiar nido; cada abeja sujeta a su propia disciplina;  todas estas cosas para quienes tiene fe son otras tantas pruebas del orden y de la creación de la que formamos parte. Y tales milagros diarios son visibles por doquier.

Cuando estamos heridas…

La oración es manantial de fortaleza y de consuelo. La oración nos ayuda a elevarnos sobre nosotros mismos, a mitigar nuestros temores y nuestras angustias, a reconocer nuestras bienaventuranzas y a dar gracias por ellas.

Las adversidades y penas de la vida resultan más difíciles de soportar si las aceptamos como parte de la manera de vivir y nos damos cuenta de que unos con otros compartimos muchas de las mismas penalidades y tragedias.

El tiempo es la suprema paciencia para el dolor y la angustia, si nos diéremos tiempo nuestras heridas siempre podrán sanarse.

Claro está que las adversidades dejarán cicatrices, pero las heridas mismas se irán haciendo menos dolorosas cada vez. Esto es algo que podemos dar por seguro.

El hallazgo logrado por nosotros mismos es el más satisfactorio. Todos nos encontramos en un viaje personal de exploración, y la variedad de cosas emocionantes que podemos encontrar no tiene límite.

.

jueves, 1 de noviembre de 2012

EL AMOR




El amor… todos lo andamos buscando, algunos llegamos a encontrarlo, pero muchos lo acabamos perdiendo, ¿por qué?

¿Por qué es tan difícil encontrar el amor? ¿Por qué cuesta tanto retenerlo?

Parece que el amor siempre intentase huir de nuestras vidas. ¿Por qué el amor es así?
Tal vez el problema esté en que el amor lo vemos de forma equivocada, así pues pensemos y reflexionemos sobre el amor:

Podemos sentir amor por un amigo, un extraño, unos padres, hijos, por la pareja, y muchos más tipos diferentes de amor, cada cual en diferente forma e intensidad…

Todos los seres humanos podemos vivir estas variedades de amor, pero…

¿Entendemos realmente
lo que es amar?

¿No está tal vez enviciada, oscurecida o equivocada nuestra idea de lo que es el amor? ¿Pensamos acaso que amar es sentir y que si no sentimos ya no existe ese amor?

¿Creemos tal vez que amar es vivir en una nube de sentimientos agradables y cálidos, tal como reflejan las películas y las teleseries?

Eso no es amar, eso es sentir amor solamente… ese amor es variable, es débil, es voluble, es cambiante, es condicionado. Pero el amor verdadero es el que permanece fiel más allá del sentimiento, más allá del momento agradable, más allá de las circunstancias ideales… ¡eso es amar!

Amar es ser fiel, amar es tener paciencia, amar es perdonar, amar es entregarse a uno mismo.

Amar no es aquello que dicen de que “Amar significa no tener que decir nunca lo siento”, sino que más bien amar es aceptar los golpes que otros te han dado aunque no te hayan dicho “lo siento” y seguir amando…

La verdad… un amor así de perfecto sólo puede encontrarse en el corazón de Dios, porque Dios es amor, quien entrega su corazón a Dios puede inspirarse en Él para tomar ejemplo de lo que es amar hasta el punto de estar dispuesto a morir.

Mi familia, mis amigos y compañeros que ahora rodean mi vida y todos aquellos con los que me cruzo diariamente necesitan un poco de ese amor incondicional del cual tan poco encontramos.

¡Tu puedes dar amor!

Eres y generas amor cada día, seamos fuente inagotable para quien nos necesita. Tú, mujer, eres y serás el mejor ejemplo de amor.